El edificio más importante a destacar dentro de la plaza es la casa que perteneció a la familia de Los Angosto, nombre que conserva la calle Angosta, una de las que llegan hasta la plaza. Fue Ayuntamiento hasta 1986 y hoy es Centro Cultural. En el se encuentran la biblioteca pública municipal, sala de exposiciones, sala de estudio, aula de acceso a internet, aulas de actividades, etc. Es un sólido edificio del siglo XVIII construido sobre un zócalo de piedra, en cuya fachada se encuentra el escudo de Alhama. También hay que destacar la reja de su puerta principal, obra de forja del siglo XIX.

Las excavaciones realizadas en los sótanos de este edificio en 1989 confirmaron la existencia de un poblado ibérico, cuya cronología se sitúa entre los siglos VI y IV a. C. Los primeros contactos comerciales en el Mediterráneo quedan confirmados por el hallazgo de cerámicas de lujo procedentes de talleres romanos y griegos, como una Gnathia con decoración pintada a mano, una paloma con espirales de color blanco sobre barniz negro, fechada entre los años 360 a 270 a. C.

En la plaza sobresale el edificio que ocupa la parte central, con una esbelta y elegante fachada de dos cuerpos, flanqueados por pilastras de orden dórico en la parte inferior y jónicas en la superior. Balcones con doseles de madera y ventanas enrejadas le dan un aire señorial. El edificio remata con un alero de madera sostenido por ménsulas del mismo material.

En las escaleras de acceso al Castillo y mirando a la Plaza vemos la remozada Fuente del Caño, hoy del Pilar, donde los vecinos de Alhama se abastecían hasta la llegada del agua del Río Taibilla.